En Argentina, el 80% de los emprendimientos no sobreviven más de dos años. ¿Cómo podemos hacer que nuestra idea sea parte del 20% triunfante? Existen dos preguntas claves que hacen la diferencia cuando comenzamos a planear un emprendimiento:
¿Agrega valor al mercado?
¿Tengo el equipo que necesito para llevarlo adelante?
En primer lugar, hay que conocer el mercado. Los emprendimientos más exitosos vienen de necesidades latentes; si uno conoce bien el mercado objetivo, o, mejor aún, si es parte de él, puede detectar esas necesidades de manera más simple. De hecho, muchas veces las ideas más exitosas no son las más audaces, sino las que vienen a cubrir una necesidad, y a agregarle valor al mercado.
El armado del equipo es otro de los puntos fundamentales para que un proyecto prospere. Para consolidar un emprendimiento y hacerlo sustentable, es importante captar nuevos jugadores de equipo con distintas capacidades y aptitudes. Por un lado, esto permite una pluralidad de perspectivas y diferentes conocimientos a la hora de avanzar en la consolidación del proyecto. No obstante, existe otro motivo igualmente importante para hacer esto: nuestra actitud frente a la vida es, en gran medida, un promedio de las cinco personas con las que mayor tiempo pasamos. ¿Quién no quiere rodearse entonces de personas exitosas y positivas a la hora de armar un proyecto?
Históricamente nunca tuvimos tantas herramientas a nuestro alcance para poder emprender. Partiendo de la base de que sí se puede, podemos invertir las estadísticas empezando por plantearnos estos dos puntos claves en nuestra próxima gran idea.